Los rumores sobre nuevas negociaciones de fusión saltaron a los mercados la tarde de este miércoles, cuando ambas empresas suspendieron sus respectivas cotizaciones en bolsa. Los planes están ahora sobre la mesa. Pero las conversaciones "aún no llevaron a un acuerdo" ni "hay garantías de que se vaya a alcanzar", aclararon Deutsche Börse y NYSE Euronext, en un comunicado conjunto.
Pese a que todavía no es definitiva, la noticia produce un impacto que ya resulta perceptible. La razón salta a la vista: un éxito de la operación crearía "el mayor operador bursátil del mundo por ingresos y beneficio", tal como destaca el comunicado, según el cual el nuevo grupo tendría sus sedes en Fráncfort y Nueva York.
