Especial para Infolatam de Rogelio Núñez).- Juan Manuel Santos ha apostado por conferir a su gobierno un sesgo reformista y entre las medidas de más alto impacto se encuentra la ley de tierras. Se trata de una especie de reforma agraria que aspira a devolver a los campesinos las tierras que les fueron arrebatadas por los narcotraficantes y los paramilitares a punta de pistola en los años 90. Además, la iniciativa quiere transformar la agricultura y la ganadería colombianas modernizándolas para convertirlas en una de las locomotoras del desarrollo del país.
El gobierno del presidente Juan Manuel Santos presentó recientemente en Barrancabermeja su programa integral de tierras con el claro propósito de saldar “la deuda que el país tiene con el campo”: “queremos que sean dueños de su propio destino. Ni la violencia ni la injusticia volverán a arrebatarles el progreso… Queremos que trabajen la tierra, sin miedo y con vocación, pensando en su futuro y en el futuro de sus hijos. Ustedes son los maquinistas, ustedes son los protagonistas de esa locomotora que le dará mayor prosperidad al campo. El país tiene una enorme deuda con ustedes y su dedicado trabajo se verá recompensado. Colombia los necesita prósperos productivos, propietarios de sus tierras… Juntos lo vamos a lograr”.