De la misma forma que lo hizo recientemente el Gobierno colombiano en el seno de la Organización de Estados Americanos (OEA), el Departamento de Estado estadounidense sigue la línea de ataques contra Venezuela al afirmar, sin pruebas, que grupos armados irregulares de Colombia usan el territorio venezolano para refugiarse.
En clara coincidencia con la línea adoptada por el saliente Gobierno del presidente colombiano, Álvaro Uribe, en su campaña de ataques contra Venezuela, el Departamento de Estado de Estados Unidos emitió su informe anual sobre cooperación "antiterrorista", en el que se destaca el supuesto uso del territorio venezolano por parte de las guerrillas colombianas para la realización de actividades de narcotráfico, secuestro y extorsión.
El pasado 22 de julio, Colombia, que ya ha cedido su soberanía a Estados Unidos para "luchar contra el terrorismo y el narcotráfico", realizó la misma denuncia ante la OEA el pasado 22 de julio, tratando de acusar a Venezuela con la presentación de supuestas pruebas sobre la presencia de rebeldes colombianos en su país vecino.