Gustavo Sylvestre
EL CRONISTA COMERCIAL
Barajar y dar de nuevo parece ser la nueva premisa de los dirigentes de la oposición con vistas a la elección de octubre.
Sanz se baja de la interna del 30. Macri adelanta las elecciones,porque no quiere quedar pegado al “efecto Cristina”. Pino medita lo que sus socios políticos le sugieren: que baje a la capital y sea candidato a jefe de Gobierno porteño. Das Neves y Felipe desisten de la interna del Peronismo Federal y analizan su futuro político.
El efecto Cristina ha calado hondo en los dirigentes de la oposición que han decidido rever sus estrategias.
Mauricio Macri duda de ser candidato a Presidente. “Yo tengo la convicción de ser candidato, pero algunos de mi entorno quieren que repita en la ciudad”, se sinceró en las ultimas horas frente a uno de lo suyos. La encrucijada de Macri es grande: puede perder la ciudad y la presidencial. Lo admiten en el PRO y por eso los más “realistas” le sugieren que vaya por la reelección para mantener vivo el partido.
Y la interna entre Gabriela Michetti y Horacio Rodríguez Larreta está en su máxima ebullición. Hasta el 20 de mayo tiene tiempo para definir por quien se inclinará, en una decisión que seguramente dejará heridos.
Ernesto Sanz tomó una decisión que se veía venir. Iba derecho a perder la interna del radicalismo y su proyecto presidencial naufragaba la misma noche del 30 de abril. Con la decisión tomada ayer gana tiempo, buscará penetrar aún más en el radicalismo, pero básicamente enderezará su discurso partir de ahora hacia el electorado independiente mostrándose como el más racional, el que puede gobernar y el que puede ganar a Cristina Kirchner. Y no descarta un armado más amplio que incluya a Francisco de Narváez en la Provincia de Buenos Aires.
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