Dejusticia.
Este documento pone en evidencia la des-proporcionalidad de los delitos 
relacionados con drogas en siete países de América Latina. A pesar de 
tratarse de conductas punibles que no generan un daño directo y concreto
 en terceras personas, el estudio evolutivo de las leyes penales de 
drogas desde 1950 hasta la actualidad, demuestra que existe una 
tendencia regional hacia la maximización del uso del derecho penal que 
se refleja en: 
1) el incremento desmedido de las conductas de drogas 
penalizadas, 
2) el crecimiento exponencial de las penas con las que se 
les castiga y 
3) la incomprensible tendencia a castigar con mayor 
severidad los delitos de drogas que delitos de una gravedad mucho más 
evidente como el homicidio, el acceso carnal violento y el hurto con 
violencia sobre las personas. 
Se concluye entonces la existencia de una 
“adicción punitiva” por parte de los Estados latinoamericanos, pues a 
pesar de encontrar cada vez menores beneficios, se opta por incrementar 
de más en más la dosis de punitivismo característica de la guerra contra
 las drogas.