EFE.
Barcelona, 26 nov
(EFE).- Artur Mas (CiU) ha ganado las elecciones catalanas, pero no sólo
sin la ansiada mayoría absoluta, sino perdiendo doce escaños respecto a
2010, lo que le aboca a negociar pactos con ERC en primera instancia
para impulsar su prometida consulta soberanista.
Estos han sido
los comicios con mayor participación en Cataluña -casi 11 puntos más que
hace dos años- y, en ellos, se han dado otras claves históricas: el
mejor resultado histórico del PPC y el peor del PSC -aunque Pere Navarro
ha salvado la segunda posición en número de votos- la consecución por
ERC del segundo puesto y la consolidación por parte de Ciutadans de un
grupo propio en sus terceras autonómicas.
CiU ha logrado el tercer peor resultado de su historia, ya que habría
que remontarse a 1980, en las primeras autonómicas catalanas con Jordi
Pujol, con 43 diputados y a 2003, en las primeras sin él y con 46
escaños, para vislumbrar un escenario semejante para CiU.
ERC, que
en 2010 se hundió con 10 diputados, ha más que duplicado ese resultado
con el nuevo liderazgo de Oriol Junquera que se perfila como la figura
clave en las próximas semanas a la hora de conformar una mayoría
parlamentaria.
Habrá que ver si los republicanos están dispuestos a
apoyar los recortes económicos y sociales de Artur Mas, y a la vez
acompañarle en la apuesta por el proceso soberanista.