El Banco Central del Uruguay (BCU) no es el único banco central de la región preocupado por evitar volatilidades en el tipo de cambio. Según datos de AFP, el Banco Central brasileño compró en el primer semestre del año 36.400 millones de dólares.
Estas compras no tuvieron por objetivo mantener una cierta paridad entre el dólar y el real, ya que en lo que va del año la divisa brasileña se ha apreciado 6,04%, pero sirvió para evitar cambios bruscos en la cotización de la divisa americana. Cabe señalar que el peso uruguayo se fortaleció 8,13% durante el primer semestre, 2% más que la moneda brasileña.
El Banco Central Argentino (BCRA) por su parte, sigue una política distinta a los bancos centrales uruguayo y brasileño.
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