La Unión Europea estudiará restablecer las fronteras interiores en circunstancias excepcionales, a partir de una propuesta de Bruselas que plantea suspender temporalmente la libre circulación entre los países, el llamado espacio Schengen, uno de los mayores hitos del proyecto comunitario.
La comisaria europea de Interior, Cecilia Malmström, anunció la idea, defendida por el presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, y el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, como manera de responder a las llegadas masivas de inmigrantes.
La concesión por parte de Roma de permisos de residencia temporal a algunos de los 25.000 indocumentados llegados a suelo italiano después de las revueltas populares en el norte de África, generó en las últimas semanas una agria disputa entre Francia e Italia, que han pedido cambios en el acuerdo Schengen.